LECTORES ÁVIDOS

 

EL RETORNO DE DRÁCULA
Nicolás Suescún

Es cierto. Se fue y dejó de venir durante muchos años. Los niños crecieron. Mire lo grandes que están: ya todos tienen gafas y van a la universidad.

Ellos no lo reconocieron. Pero entre él y yo las cosas pasaron como si no hubiera ido nunca. El mismo día que volvió nos dimos cuenta. No había cambiado nada. A los minutos estábamos donde habíamos empezado, cuando nos casamos hace ya tiempo.

El me dijo que no quería sangre para la comida. Yo le dije que no había nada más.

 

     

LOS ANIMALES PRODIGIOSOS
René Avilés Fabila

El mirmecoleón

El zoológico adquirió hace poco un mirmecoleón. Las personas suelen aglomerarse ante la jaula, observándolo detenidamente: con la parte delantera de león y la trasera de hormiga, más que terrible es cómico. El público se divierte cuando el ser fantástico quiere realizar a un tiempo las tareas naturales de sus padres: la trasera desea trabajar sin descanso mientras que la delantera insiste en atragantarse de carne cruda. En su intento por reaccionar individualmente la bestia se desespera, ruge, se agita, sufre convulsiones, pero la división nunca llega y triunfa el todo, para nada más ser mirmecoleón.

 

     

JULIO CORTAZAR
De cronopios y famas

Historia

Un cronopio pequeñito buscaba la llave de la puerta de la calle en la mesa de luz, la mesa de luz en el, dormitorio, el dormitorio en la casa, la casa en la calle. Aquí se detenía el cronopio, pues para salir a la calle precisaba la llave de la puerta.

 

     
 

AMOR 77

Y después de hacer todo lo que hacen, se levantan, se bañan, se entalcan, se perfuman, se peinan, se visten, y así progresivamente van volviendo a ser lo que no son.