Equipo mexicano de Básquetbol
Medalla de bronce.
Berlín 1936
12 de Agosto de 1936. El equipo mexicano está en la lucha por las medallas. Si gana mañana habrá llegado a la final del primer torneo olímpico de basuqetbol. Solo hay un problema: El rival será Estados Unidos, el invicto, el que tiene tres jugadores que rebasan los 2.00 mts., el que ha anotado más de 30 puntos en cada juego, el que es el favorito para ganar la medalla de oro. Así que meditan el coach Alfonso Rojo de la Vega y su asistente principal, Leoncio Colorado Ochoa. ¿Qué hacer? es demasiado poderío. Entonces discurre Rojo de la Vega: Defendernos lo mejor posible y tratar de sorprender, toman lápiz y papel. Trabajan toda la noche, trazan tácticas, diseñan técnicas. El plan de juego queda plasmado en unas hojas, cada línea significa un movimiento especial, cada basquetbolista tiene una misión específica.
13 de agosto, no hay mucho tiempo, asi que temprano el llamado Equipo del Rojo y el Colorado se va a entrenar a un gimnasio privado y practica hasta extenuarse. Horas más tarde ya se encuentran en la cancha de arcilla, quienes harán frente a los estadounidenses han sido anunciados: Los defensas: Jesús Olmos y Raúl Hernández; el centro Carlos Borja, y los delanteros Víctor Hugo Borja y Greer Skoussen. Los reservas: el zaguero Francisco Martínez y el atacante Ignacio de la Vega.
¡Juego! se eleva el balón en el centro del terreno. Ataca Estados Unidos. Lo hará en todo momento, pero la de enfrente es una compleja barrera: Los jugadores mexicanos se mueven con rapidez y acuden a un doble marcaje personal. Se agrupan en su medio campo y de repente, parte uno de ellos en veloz contraataque. El pase es largo y va al lugar. Hombre y esférico se encuentran rumbo a la canasta estadounidense. La jugada sorprende, una y otra vez, a un cuadro obsesionado en descifrar el crucigrama defensivo que le ha sido planteado. Y no hay mas remedio: faul o canasta. La lucha se plantea bajo esas condiciones y así se sostiene. Al final no hay remedio, se impone la superioridad estadounidense. El marcador es de 25-10, pero se han producido dos hechos que marcarán para siempre este duelo: 1.- Por primera vez en el torneo, el poderoso ataque de nuestros vecinos del norte ha sido frenado en menos de 30 puntos, 2.- Su sólida defensiva, pillada en varias ocasiones, tuvo que recurrir al faul en diez de ellas. México, pues, no anotó una sola canasta; sus diez puntos fueron producto de tiros libres.
Se abrazan los jugadores al escucharse el silbatazo final, y se acerca James Nedless, coach del equipo ganador, al maestro Rojo de la Vega, que es nueve años menor. Le felicita: -Casi indescifrable su táctica defensiva, coach- Rojo de la Vega sonrie complacido. -¿como se llama?-, pregunta Nedless. -Rompimiento rápido-, responde el entrenador mexicano. -¿Puedo mirar?- Entonces Rojo de la Vega toma papel y lapiz, vuelve a dibujar trazos complicados y los entrega a Nedless. Se aleja sonriente el entrenador estadounidense. Acaso ha nacido en Berlín y gracias al ingenio de un par de técnicos mexicanos, el que será famoso sistema Fast Breake , tan popular en los Estados Unidos.
Integrantes de la selección olímpica:
- Andrés Gómez Domínguez
- Greer Skoussen Spielbury
- Francisco Martínez Cordero
- Jesús Olmos Moreno
- Jose Pamplona Lecanda
- Carlos Borja Morca
- Rodolfo Ochoperena
- Víctor Hugo Borja Morca
- Raúl Hernández Robert
- Ignacio de la Vega
- Silvio Hernández del Valle
Fuente:
Medallistas Olímpicos Mexicanos, Tomo I, publicación de la Comisión Nacional del Deporte.
Autores: Ramón Márquez C. y Armando Satow.
Enero de 2004. REGRESAR |