En un planeta tan vivo y dinámico como la Tierra, no existe ningún organismo separado o aislado del ambiente, todas las especies necesitamos el agua, el suelo, el aire, así como distintas sustancias para nutrirnos; dependemos del clima y establecemos estrechas relaciones con otros seres vivos. Hemos formado así un extraordinario tejido vivo; no obstante, los millones de hilos entrelazados que forman este frágil tejido, ya se encuentran muy debilitados a causa de la inconsciente actividad humana que sigue alterando el equilibrio natural del planeta.
Afortunadamente, el mundo ha hecho esfuerzos para revertir la continua degradación del entorno, y las celebraciones son una gran apertura para firmar o ratificar convenios internacionales que representan un paso importantísimo hacia la conservación del medio ambiente y el uso sostenible de la diversidad biológica y sus componentes. Por ello, el pasado 5 de junio, designado por la ONU como el Día Mundial del Medio Ambiente, fue un gran motivo para que niños, jóvenes y adultos identificaran en qué parte de este complejo entretejido se encuentran hoy en día, revaloraran la extraordinaria biodiversidad de la Tierra que habitamos, reconocieran nuestra infinita dependencia con el entorno natural y asumieran los enormes retos que están por venir.
Junio de 2014 representó pues, una oportunidad para que en el marco del Programa Educar con Responsabilidad Ambiental (ERA), México —una de las cinco regiones más biodiversas del planeta— y Portugal —un estado miembro de la Unión Europea destacado por su patrimonio natural y hábitat privilegiado de muchas plantas y animales—, desarrollaran actividades en colaboración y a distancia, con el objetivo de sensibilizar y educar con dicha responsabilidad a gran parte de su comunidad escolar. Esta interacción despertó tanto el interés por valorar la diversidad biológica de sus países y redoblar esfuerzos para reducir la destrucción del ambiente y frenar la acelerada tasa de extinción de especies, que ya estamos listos para implementar una vez más esta iniciativa, a la que esperamos se sumen otros estados de nuestra República y más países Latinoamericanos.
Vamos a lograr buenos resultados porque el único objetivo es que todos disfrutemos no sólo de este recorrido, sino de un futuro más digno, próspero y seguro.
¡Todos están invitados a reflexionar sobre lo apremiante que es salvaguardar tanta riqueza natural!
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