El vocablo caligrama, como lo conocemos ahora, viene del francés “calligramme” y se suele utilizar para calificar a poemas de carácter visual en los cuales las palabras utilizadas con la finalidad de crear una imagen, cumplen una doble función:
generar imágenes por medio de los sonidos y la cercanía de unas palabras con otras.
disponer las palabras sobre el papel (o en las artes visuales otro tipo de soporte: como madera, metal, telas, acrílicos u otro tipo de materiales) de manera que conformen o “dibujen” la forma a la que se está haciendo alusión que puede ser un personaje, un animal, un paisaje, una sensación de quien escribe o cualquier objeto o tema. Así, podemos hablar de caligramas o poemas visuales que hablan y dibujan a un tiempo sobre el yo, algún animal, el viento, el instante, la lluvia, la tristeza, etcétera.