El agua es un tesoro que hemos menospreciado, es el “oro azul” por el que en un futuro próximo se desencadenarán graves conflictos entre naciones, al igual que ha sucedido con el oro negro: el petróleo.
El agua apta para el uso humano, dulce, potable y de fácil acceso es una parte muy pequeña del total y su escasez no se debe sólo a las condiciones naturales de determinadas regiones, sino que tiene mucho que ver con el crecimiento demográfico, el despilfarro y la contaminación.

La situación es preocupante y muchos expertos consideran la cuestión del agua como el desafío más importante que debe acometer la humanidad en el siglo 21, pues de no hacerlo la supervivencia de nuestra especie y de millones más está en riesgo.

El tema central del Día mundial del agua 2012: “El agua y la seguridad alimentaria”, pone de manifiesto que es urgente  afrontar el aumento de la población mundial (actualmente ya somos 7 000 millones de personas) y garantizar el acceso a alimentos nutritivos para todos; para las actuales y futuras generaciones que requerirán de recursos hídricos y alimenticios para sobrevivir. Sabemos que todo esto exige, no sólo una poderosa fuerza de voluntad o de acciones políticas viables y concretas , sino de una serie de medidas y acciones de cuidado en las que todos podemos contribuir de la siguiente manera:

• No gastar más agua de la cantidad mínima que se necesita (para uso personal, doméstico o industrial)
• Producir más alimentos, de mejor calidad, con menos agua
• Consumir productos que hagan un uso menos intensivo de agua
• Reducir el desperdicio de alimentos; nunca se consume el 30% de los alimentos producidos en todo el mundo y el agua utilizada para producirlos se pierde definitivamente

He aquí una gama de más acciones concretas para el Reuso y Sustentabilidad del agua